En mi trabajo con empresas y equipos de liderazgo me toca escuchar mucho estas frases:
"Tenemos la intención… hicimos un manual, hicimos un taller el año pasado, se supone que lo sabemos, queremos… está en el manual, recursos humanos se encarga…"
Pero, pero, pero: algo pasa y los seres humanos -y sobre todo las empresas e instituciones- tendemos a quedarnos tranquilos con el paso por el manual, es nuestra zona de confort.
¡Pero falta lo más importante!
Ponerlo en práctica, poner ese deseo -intención- en ACCIÓN, una dificultad muy frecuente en todos los ámbitos en estos días: accionar.
Puedo decir en lo personal "declaro/quiero mejorar mi alimentación, voy cultivar hábitos saludables, haré deporte, dormiré 8 horas, meditaré media hora, etc. Sé que me hará muy bien", pero paso por fuera de una pasteleria o llega la hora de hacer deporte y estoy cansada, o ya me comí el pastel.
Entonces me diré a mi misma: "Comienzo el Lunes" 😏 y eso me tranquiliza, y llega el Lunes y vuelve a suceder lo mismo: cuesta salir de ese lugar, ¡aunque sepamos que es para mejor!
En el mundo de las empresas pasa lo mismo: los viejos hábitos comunicativos son una dulce tentación, las viejas costumbres: "así se ha hecho siempre", la resistencia innata al cambio en las formas de liderar que nos está tocando transitar.
Desde mi mirada las empresas son igual que las personas, organismos vivos y en constante transformación, ¿cómo hacer para adecuarse a los nuevos tiempos sin perder identidad y esencia y además reconociendo y valorando su historia?
¿Cómo dar espacio a las nuevas ideas y generaciones sin dejar de valorar el talento y fuerza que los llevó a donde están hoy?
¿Cómo pasar del deseo o la intención a la acción? Para que el día de mañana no se convierta en “fue un buen deseo e intención, no sabemos que pasó pero volvimos a lo mismo”.
La fórmula tiene varios componentes indispensables :
Deseo + motivación + voluntad + perseverancia + resiliencia (para volverlo a intentar si no resulta a la primera) + humildad, y sobre todo: detenerse a escuchar atenta y efectivamente las necesidades de nuestros equipos y las emergencias futuras, sin dejar de lado nunca las necesidades de nuestros clientes (¡que también están en constante transformación!).
Esta fórmula me ayudará a anticiparme al cambio, tendré más consciencia de lo que se viene.
¿El último dato?
El ingrediente secreto es la gestión emocional para sostener y perseverar en esa transformación y proceso, porque muchas veces tendré ganas de comerme el pastel -de las antiguas formas- o llorar con mucha tristeza por dejar ir los tiempos que ya no están...
¡O quizás tendré tanto entusiasmo que querré hacer todo en un dia hasta colapsar! como la primera vez que vamos a un gimnasio. 😩
Recomiendo el paso a paso, perseverancia, constancia para crear nuevos hábitos sin olvidar del disfrute o celebración de los logros.
Para que se animen y me sigan contratando para acompañarlos en estos bellos procesos les dejo una frase que a mi me dice mucho ..
“Si te vas a mover hacia el futuro, asegúrate de llevar lo mejor del pasado"
Carolina Carmona Alba
Fundadora de Con Sentido
www.con-sentido.cl
carolina@con-sentido.cl
Kommentare